Sonará extraño, pero existe momentos en la vida en los que, por unas causas o por otras, el cuerpo nos pide una sopita, y no hay mejor manera para probar un caldo de arroz acompañado de zanahoria. En esos momentos, lo mejor es preparar dicha sopa, presentarla bien bonita, comerla despacio y degustar su sabor.
Preparación: 1 hora
Porciones: 2